La desigualdad cultural ha originado incomprensiones entre las sociedades humanas. 

¿Qué entendemos por desigualdad? En el ámbito humano, se habla de desigualdad cuando existe falta de equilibrio entre personas. La desigualdad puede presentar distintas facetas, es importante saber también que existen varios tipos de desigualdad. Existe desigualdad social, económica, educativa, de género, legal. La desigualdad del tipo que sea trae consecuencias graves y la pobreza es una de las principales acompañada de problemas de desnutrición o hambre. La desigualdad en los derechos culturales se genera debido a las diferencias en la participación y toma de decisiones, estas a su vez se asocian de manera sistemática a ciertos factores o procesos sociales, provocando así una relación que entendemos como injusticia, es multidimensional y multifactorial. Uno de los factores importantes es la discriminación étnica, racial o de género, la considero así ya que esta es determinante en el momento de acumular riquezas, no me refiero a las culturas diferentes sino al acceso de las personas a la formación y educación.

Generalmente la desigualdad cultural se desarrollará en diferentes ámbitos dentro de una sociedad, pues cuando se integran a convivir personas de diferentes culturas originan esas incomprensiones humanas, ya sea en sus creencias, costumbres, celebraciones, y más. Así mismo se da el asilamiento entre individuos de una misma cultura, por determinados factores que apartan a una persona de un grupo social.

Los choques culturales hacen referencia al impacto de pasar de una cultura familiar a una desconocida. Este impacto incluye ansiedad y sentimientos como sorpresa, desorientación, incertidumbre y confusión, que se sienten cuando una persona debe adaptarse a un entorno cultural o social diferente y desconocido. Es por esta razón que hoy en día muchas de las culturas, pueblos y nacionalidades indígenas están desapareciendo o dejando de tener contacto con la sociedad, debido a que en muchos de los casos no son aceptados al convivir con otros grupos culturales como en las ciudades, generando que las futuras generaciones de estos pueblos o nacionalidades dejen de lado sus costumbres, creencias, religión, idioma y vestimenta, para tratar de equilibrarse o adaptarse con ese grupo cultural con el que conviven.

También debemos reconocer que dentro de una misma cultura se genera desigualdad, pues muchas personas que buscan pertenecer a un grupo social, no pueden hacerlo por falta de habilidades sociales, de seguridad o un bajo autoestima, hacen que genere esa incomprensión, aislamiento y rechazo entre el individuo y el grupo.

Se debería equilibrar las desigualdades culturales, en primera instancia para que las culturas indígenas no desaparezcan y las siguientes generaciones pueden sostenerse y seguir siendo los mismo sin generar esa adaptabilidad, mediante la comprensión de que una cultura desconocida debe ser acogida socialmente de la mejor manera, sin discriminación alguna, para que esta prevalezca y no llegue a extinguirse.

“La diversidad en la unidad y la unidad en la diversidad”.

A pesar de que los seres humanos encontramos una unión en nuestra composición anatómica e incluso en lo que precede de la misma y, principalmente, en el antepasado en común que compartimos, es inevitable pensar en las diferencias que convergen a raíz de nuestra convivencia.

La diversidad que se percibe en los diferentes aspectos de nuestra vida, resulta tan extrema que se convierte en una desigualdad, que no solamente se remite a temas de género o economía, sino que radica en una comprensión mucho más amplia, que es a nivel cultural.

Para ilustrar claramente, cito a las sociedades del norte y las sociedades del sur, quienes partiendo de la premisa de unidad, tienen culturas con una perspectiva diferente en donde hallamos incomprensiones.

Para las sociedades del norte, la ciencia, el desarrollo industrial y la globalización han sido eje principal de su sociedad y los lineamientos que determinan su ética, moral, estructura social, política, económica, costumbres, pensamientos, entre otros; mientras que, en las sociedad del sur, el respeto y veneración por la naturaleza prevalece desde sus ancestros, es la orientación de su estilo de vida y la base de su cultura mayormente, incluso, es el principal fuerte de su economía.

Tanto para las sociedades del norte, como las sociedades del sur, la razón de su existencia y sus pensamientos sobre la vida divergen, no son las mismas, incluso se encuentran ante un choque cultural que trasciende toda similitud que les acompañaba, no obstante, aun en las incomprensiones que surgen entre los mismos, es importante recordar que, todas estas ideas que nacen de las sociedades son complementarias y aun en la diversidad surge un punto de encuentro, porque los ámbitos que nos preocupan son los mismos en cualquier parte del mundo y cultura. La economía, la ciencia, la naturaleza, la política, estilos de vida, costumbres y otros, nos competen a todos.

Debido a que los preceptos religiosos conducen al comportamiento de los creyentes, es necesario pensar críticamente sobre las consecuencias de la fe en general y las consecuencias de la creencia religiosa en particular, y para hacerlo, se deben considerar los principios básicos que subyacen al pensamiento crítico. y la pedagogía crítica contemporánea. Las creencias infundadas o aceptadas a críticamente son fuente de subjetivismo, dogmatismo y fanatismo que hay que evitar. Se discute breve mente el papel de los líderes religiosos y la filosofía religiosa en la educación de la fe y se identifica la aparición del pensamiento crítico en la fe religiosa. Analiza cómo algunos líderes religiosos manipularon a sus seguidores interpretando extrañas interpretaciones del Libro Sagrado, a menudo motivados por la prescripción protestante prerrenacentista de Lutero de una interpretación liberal de la Biblia. Destacar el necesario diálogo entre la razón y la fe; promover el pensamiento crítico como mecanismo de educación religiosa. Podemos decir que los roces religiosos que se han ido generando a lo largo de la historia no han causado nada más que problemas y discusiones que se podrían solucionar con el dialogo y la aceptación de una visión diferente sobre esto.

¿La desigualdad, es una ilusión que creo la humanidad para diferenciarse los unos de los otros, o tal vez es la desmedida ansia que tenemos por poder y dominación? Como seres humanos el entender que todos los habitantes de este planeta somos iguales, es algo complejo. Ya que buscamos sentir que dominación sobre alguien,   logrando alimentar nuestro ego. Yo me pregunto cuando los españoles pisaron tierra Americana, quienes eran los irracionales ellos o nosotros. Los españoles no entendían la nueva cultura a la que se enfrentaban, solo los vieron como seres inferiores. Pero donde queda la cosmología andina, la ciencia ancestral, algo que ellos no entendían. Creyeron que eran dueños de la única verdad que su desarrollo podía minimizar los inventos, forma de vida de inca, vendiendo una idea de desigualdad, al creerse dioses, solo fue falta de comunicación y codicia humana la que propaga tiempo después muerte, esclavitud, genocidio en tierras andinas.

A l fin del día es muy importante vivir en armonía, respetando y siendo consientes de todo lo que nos rodea. Tomando en cuenta  que la diversidad nos hace culturas ricas, libres de pensamientos cuadrados que se sustentan con ideas de poder de unos pocos. Démonos la oportunidad de ver más allá de lo que ven nuestros ojos, y no dejando que una cadena invisible como lo es la desigualdad forje nuestros caminos como ciudadanos planetarios.

Debemos tener muy presente que nosotros, es decir, cada uno generamos esta división, producimos esta posibilidad de vernos como desiguales, ya que la igualdad natural del hombre no implica la igualdad de las culturas.

Hay incomprensiones entre las sociedades humanas entre varios ejes de desigualdad como pueden ser: clase, género, etnicidades, raza, lugar de residencia entre muchos más.

Investigar las desigualdades desde la perspectiva del nacionalismo metodológico implica una conceptualización entre la sociedad y lo social desde estado-nación, sin reflejar sobre sus implicaciones.

El enfoque econométricos dominó el campo de investigación sobre la desigualdad social, dando lugar al estudio de la pobreza y la lucha contra la pobreza.

La perspectiva clásica, centrada en la clases y el estratos, se ha expandido en los últimos años, con la proliferando de los análisis cualitativo y cuantitativo que analizan las desigualdades sociales, políticas y económicas.

Este escenario de desigualdad perjudica, en particular, a las personas nacidas y que viven en zonas desfavorecidas, que se caracterizan por ofrecer menos oportunidades y menores niveles de bienestar en diversas dimensiones del desarrollo, y por sistemas de relaciones sociales que perpetúan y profundizan la vida económica y social, que exige revertir nuevas relaciones sistémicas. Estas desigualdades también perjudica a importantes sectores de la población que se concentran en la periferia de las ciudades metropolitanas y otras áreas urbanas.

El territorio puede ser considerado como uno de los ejes del ordenamiento de la desigualdad social, ya que, tiene un peso decisivo en su magnitud y reproducción en diversos campos del desarrollo social. Como se dijo, el lugar de nacimiento o el de residencia determina las oportunidades y condiciones socioeconómicas, afecta la realización de los derechos políticos, económicos y sociales y puede ser una fuente de discriminación.

La desigualdad cultural puede llevar a la incomprensión y el conflicto entre las sociedades humanas debido a las diferencias en las creencias, valores y prácticas. Por ejemplo, las diferencias culturales pueden dificultar la comunicación entre personas de diferentes orígenes, y pueden llevar a la discriminación y el racismo. Esto puede tener un impacto negativo en la calidad de vida de las personas afectadas y en la cohesión social en general.

Es importante fomentar la diversidad y el respeto mutuo para construir una sociedad más inclusiva y comprensiva. A través de la educación y la comunicación, podemos aprender sobre otras culturas y trabajar para superar los prejuicios y estereotipos. Por ejemplo, la educación intercultural puede ayudar a los estudiantes a comprender y apreciar las diferencias culturales, mientras que la comunicación efectiva puede ayudar a las personas a superar las barreras del idioma y la cultura.

Sin embargo, es importante recordar que cada cultura tiene su propia riqueza y valor, y debemos esforzarnos por comprenderlas y apreciarlas en lugar de juzgarlas. Además, es importante reconocer que la desigualdad cultural no es solo un problema entre diferentes culturas, también existe dentro de una misma cultura, y es necesario trabajar para erradicar estas desigualdades también. En resumen, la diversidad cultural debe ser celebrada y protegida, y debemos trabajar juntos para construir una sociedad más justa y comprensiva para todos.

Sí totalmente, y porque digo esto, al momento de observar el video del taller en mi cabeza se me visualizó una idea y es la siguiente “la desigualdad en algunas personas se volvió cultura” al momento que pensé en esta idea averigüe más para sustentar mejor mi pensamiento y efectivamente si buscamos que es cultura en primera fila de búsquedas en Google encontramos que es un “Conjunto de conocimientos e ideas no especializados adquiridos gracias al desarrollo de las facultades intelectuales, mediante la lectura, el estudio y el trabajo” ya con esta explicación tan clara de cultura puedo responder a mi afirmación y decirles que nosotros como seres humanos nos creemos el centro del mundo, hemos mejorado en múltiples cosas: Conocimiento, Tecnología, Ciencia, y eso hace que nos creamos indestructibles y generamos desigualdades y no solo culturales también en Guerras y conflictos armados, Corrupción, Acceso desigual al conocimiento etc.

Un ejemplo claro de como la desigualdad social genera incomprensiones entre las sociedades humanas es en algo simple, es conocido que América Latina y el Caribe es la región menos equitativa del mundo en cuanto a la distribución de su riqueza, lo interesante de esto es que la región justamente pobre tiene que ver con un componente étnico racial al cual al cruzarlo con la variable de género determina que los pueblos indígenas y afrodescendientes lleven la peor parte.

Para finalizar con todo esto quiero demostrar que se ha anclado de una manera inexplicable a raíces históricas a lo largo de periodos y esto genera incomprensiones  sociales como ejemplo final para dejar esto mas claro “actualmente los afrodescendientes del Ecuador presentan un cuadro de desigualdades y desventajas estructurales frente a otros grupos culturales, en especial la población mestiza y blanca”

¿Por qué algunas características naturales de los humanos tienden a naturalizar la desigualdad, como las diferencias raciales y de género? Las diferencias se vuelven problemáticas cuando una sociedad de clases se ve reforzada por un discurso de igualdad y meritocracia. La naturalización de la desigualdad parte de la lógica de que tanto la raza como el género son medios para legitimar la desigualdad, para presentar estas diferencias como irrefutables, para negar su construcción sociohistórica. La naturalización de la desigualdad es un mecanismo insidioso que justifica la injusticia de la sociedad de clases. Este proceso parte del discurso de la meritocracia, en que se plantea la ilusión de los humanos nacemos libres, iguales y con igualdad de oportunidades. Estos elementos del discurso liberal benefician a las clases acomodadas y plantean a las clases desposeídas como fallidas en el intento de superarse. La intersección de raza y género es la que configura los estratos en la sociedad de clases. En este sentido, el género da lugar a la reproducción de la clase y ambos conforman las jerarquías sociales. Tanto la raza como el género pueden utilizarse para justificar la desigualdad social sin considerar que ambos son construcciones sociohistóricas. En este sentido, el discurso del mérito, junto con la ilusión de la igualdad de oportunidades perpetúa la desigualdad.

Hoy en día en América Latina, por ejemplo, existe una desigualdad severa en relación al acceso al empleo, la educación, la salud, entre otros. Esta desigualdad no está determinada por diferencias biológicas, sino que aquí entran en juego variables como la clase social, la cultura y la región. Para terminar, puedo sugerir que pensemos que con el esfuerzo suficiente se pueden superar las condiciones de clase, pero en el fondo se oculta la estructura del orden social de la desigualdad, la ilusión de que los individuos son dueños y señores de su destino, oculta y justifica las lógicas de las jerarquías y estratos en la sociedad de clase, el racismo y el sexismo se expresan como la estructura ideológica que presenta las desigualdades de la sociedad de clases como natural.

La desigualdad cultural genera desconocimiento e incomprensiones entre las sociedades, una afirmación del estudio en cifras decía que un contexto de desarrollo sin igualdad no es desarrollo, claramente es así ya que entre las personas se oponen al desarrollo humano contribuyendo a la inestabilidad tanto social como política, favorecen la inseguridad y debilitan las oportunidades de progreso de una sociedad. Mientras más desigualdad, más violencia, más pobreza y más fragmentación social.

Los humanos hemos pretendido disponer de un patrón moral inmutable en el tiempo, siglos atrás, la religión impuso normas sobre la sociedad occidental que condicionaron la historia y en cierto punto generaron desemejanzas, por ejemplo marcando una discriminación tratando a una persona o grupo, de manera no favorable debido a sus creencias religiosas.

Nada tiene de extraño que las condiciones del medio afecten el comportamiento, es una norma que opera sobre todos los seres vivos, esto va desde la esclavitud, el colonialismo, hasta la actualidad, pasando por las guerras y los dictadores. Siempre con opresión y desigualdad, y en la situación en la que estamos tenemos que cambiar de esquemas, de formas de pensar y de actuar.

La civilización es algo muy, muy frágil, estas colapsan, y las que las substituyen son culturas de supervivencia, y más aún con las distintas diferencias sociales que perjudican a varios, pero también se debe tener en cuenta que ante el colapso uno puede reaccionar y mejorar.